sábado, diciembre 16, 2006

AULO VITELIO, BUEN PROVECHO

ace pocos días, cayó en mis manos un libro de la historia de Roma, en el que en uno de sus capítulos, se mencionaba de forma expresa las vivencias y costumbres de Aulo Vitelio. Siempre me apasionó la historia del Imperio Romano, no ya por su expansionísmo y la aporctación que el mismo supuso a las civilizaciones que fueron romanizadas, sino por el carácter estratégico con respecto al entendimiento de la táctica militar, su aplicación, y la obtebción de resultados tras la consolidación de lo éxitos obtenidos.
Pero mi sorpresa se debió a la personalidad de Aulo, en el momento de comenzar mi lectura, me lo imaginé, -quizás, llevado por la idea estereotipada de lo que siempre entendía por un emperador-, a un hombre de mirada larga, gestos sumamente controlados y de figura que infundia los mayores de los respetos, con su tonsor(peluquero), esperándolo para acicalarlo en su tonstrinaes (peluquería)particular en las primeras horas de la mañana, impecable luciendo una majestuosa túnica, y dejando a su paso el olor de los mejores perfúmenes y rejuvenecido con los cosméticos de la época como podria ser splenia lunata-(cosmético que usaban la alta aristocracia). Pero como decía al principio, Aulo rompió el molde de los conocimientos anteriormente expuestos, es decir, su ambición para obtener el cargo de emperador, se debía sólo y exclusivamente para saciar su apetito desmesurado, hasta el punto que durante el día comía de cuatro a cinco veces . A lo largo del Imperio, desplegó unos agentes gatronómicos, para que le consiguiese, los productos más exóticos y exquisitos para su mesa, llegando a exhibir en uno de sus célebres banquetes hasta dos mil pescados y siete mil pájaros, todos raros y jamás visto tiempo atrás.
Se dice que si el emperador hubiese vivido mucho, tiempo, todos los ingresos del Imperio, no habrían bastado para saciar su apetito. Desbancando en esa carrera sin sentido de la hambruna personalizada a emperadores como Nerón y a Plinio el viejo. Tanto le obsesionó los placeres de la "buena" mesa, que descuidó las obligaciones propias de gobernante de un gran imperio, terminando sus días a manos del pueblo exaltado y estrangulado por manos anónimas, cerrándole para siempre la via principal de su ingesta.
NELSON

9 comentarios:

Anónimo dijo...

Paulo Vitelio germánico, más conocido como "joyita de la historia, solo hay que ver de la gente que le rodeaba, o mejor, de la gente de la que se supo rodear. Nació noble y rico, fué educado por unos de los más terroríficos emperadores romanos, Tiberio, al que siguió Nerón, y ni siquiera el buen hacer de Claudio pudo con él. Ha pasado a la historia como excelente gastrónomo. Ya como emperador dedicó prácticamente las arcas romanas en banquetes y orgías. Harto el pueblo de Roma fué ajusticiado a golpes y arrojado al Tiber. Siempre me ha apasionado el Imperio Romano, a pesar de los escandalos que grandes lecciones nos han dado, en todos los terrenos. Otro día hablmos del gran Justiniano.

Unknown dijo...

Siempre un placer poder compartir opiniones y comentarios con alguien tan docta. Nelson

Anónimo dijo...

No soy docta y tu lo sabes, en eso nos parecemos mucho. Soy curiosa, lectora empedernida e internet nos da la posibilidad a los que somos así de ampliar lo que antes buscabamos en bibliotecas. Con respecto a tu duda te cito mi fuente (Historia de la cocina, de Jaime Ariansen Céspedes)pero creo que hablamos de la misma persona, aunque no sabria decirte si es Aulio o Paulo, lo intentaré comprobar.

Unknown dijo...

heaven, yo por el contrario no utilizo internet para aumentar mis conocimientos, la razón es porque hay cantidad de páginas que no son absolutamente rigurosa con la historia, sino que lo baso fundamentalmente en textos que tenga autor y sus fuentes estan más que contratadas, esto no quiere decir que no lo consulte, pero si observas, me inclino más por lo inédito, que por lo que saben la gran mayoría.Con respecto al pesonaje que tratamos en cuestión es Aulo Vitelio, y la frase "joyita de la historia", se le aplicó a Galba, un emperador contenporáneo de aquel famoso cuarteto. La inquietud, y el interés en aumentar los conocimientos, ayudan a ser docto en alguna materia. Saludos y feliz entrada de año.

Anónimo dijo...

Vale Nelson. Jaque mate. Hago mutis por el foro. No compito. No voy de docta. Leo lo que puedo donde puedo, pero no me interesa todo sobre la historia. Me gustan tus anecdotarios y por eso los comento, como veo que tu vas de otra cosa, cierro tu bitacora.- Adios.

Anónimo dijo...

Heaven, lamento que tomes el cruce de comentarios por un derrotero que no he deseado, intentaba explicarte la forma en la cual extraígo mis artículos, nunca he competido porque de eso si es verdad que los conocimientos se quedan huérfanos, se trata de intercambiar conocimientos. También observo que es difícil contradecirte, pero la vida en muchos casos es pura contradicción, y hay que aceptar opiniones yuxtapuestas a la nuestras.Saludos

Anónimo dijo...

Ahora ya no vais a intercambiar información con lo entretenida que yo estaba con vuestros peloteos...no me lo creo, espero que reconsideres tu postura, heaven, o si no, me dejaras huérfana de lectura.Besos a los dos.

Anónimo dijo...

Se es docto en alguna materia cuando se obtiene un DOCTORADO por alguna universidad. Yo tengo mis temas favoritos y leo sobre ello(NO EN INTERNET)cuando has leído el sexto libro sobre el tema, te das cuenta que ya no vas a aprender más. Eso es lo que yo te intento explicar y tu Nelson no entiendes. No es que yo sea dificil de contradecir, no me ha gustado que me llamaras DOCTA por el "tonillo". Lo que los demás piensan de mi, es problema de los demás. Me enroco.

Anónimo dijo...

heaven, retiro mi calificativo de docta, no iba con mala intención, pero si te diré algo, no sabes cuanto me gusta que discrepes conmigo, os pareceis mucho,y en los momentos de ausencia, parece que la tengo cerca.