viernes, junio 08, 2007

ARTEAGA Y EL DRAMA MUSICAL

Bolonia, 1783 — Esteban de Arteaga publica su estudio sobre la ópera en Italia, de expresivo título:Le rivoluzioni del teatro ,nusicale italiano della sua origine fino al presente. Escrita a instancias del padre Martini, quien puso a disposición del autor su extensa biblioteca, la obra recorría la historia de la ópera italiana desde las primeras manifestaciones medievales hasta el melodrama metastasiano.
Sin embargo, al mismo tiempo establecía diferentes relaciones entre el drama musical y las artes plásticas, la poesía y la música, todas ellas en realidad interconectadas.Finalmente, Arteaga resumía su idea de la materia tratada de este exacto modo:«Un sistema dramático, al menos tal como yo lo concibo, basado en la exacta relación de los movimientos de ánimo con los acentos de la palabra o del lenguaje, de estos con la melodía musical, y de todos ellos con la poesía, exigiría los talentos de un filósofo como Locke, de un gramático como Marsais, de un músico como Handel o Pergolesi, y de un poeta como Metastasio.»
Miembro de la Compañía de Jesús desde 1762. Arteaga (nacido en 1747). marchó a Córcega cuando los jesuitas fueron expulsados de España y en 1769 dejó la Compañía para frecuentar la universidad de Bolonia y realizar diversos viajes, hasta morir en París en el año 1799, muy alejado de sus primeros tiempos.
Entre su producción se hallan unas Investigaciones filosóficas sobre la belleza considerada como objeto de todas las artes (1789) y el estudio Dell influenza degli arabi sull origine della poesia moderna in Europa (1791),escrito en colaboración con Juan Andrés y J. Pla.

RECONQUISTA DE MENORCA

enorca, 5 de febrero de 1782 — Tras la rendición de los ingleses, la isla de Menorca es reincorporada a la Corona española. La ocupación de Menorca es largamente planeada por Carlos III y Floridablanca, ayudados por el mallorquín marqués de Sollerich. Tras asegurarse que las tropas españolas serán bien recibidas por los menorquines, Floridablanca organiza en Cádiz una expedición de 50 navíos, que transportan a
9 000 hombres (a estos se unen después otros 16 000 soldados). Por deferencia a Francia, país aliado de España, Carlos III coloca al duque de Crillonal mando de las tropas. Los expedicionarios desembarcan cerca de Mahón el 9 y 10 de agosto de 1781 y los ingleses se hacen fuertes en el castillo de San Felipe, mientras que las poblaciones son ocupadas sin resistencia. Crillon ordena sitiar a los ingleses, que, hambrientos y muchos de ellos enfermos de escorbuto, se rinden el 4 de febrero de 1782. Tras discutir las capitulaciones, las tropas ocupan el fuerte al día siguiente. Como recompensa, Carlos III nombra a Crillon duque de Mahón y capitán general de sus ejércitos,y a Sollerich, grande de España.

EL BANCO DEL ESTADO

adrid, 2 de junio de 1782 — Se crea un Banco nacional, vieja aspiración de Floridablanca, al firmar Carlos III la real cédula que «crea, erige y autoriza un Banco nacional y general para facilitar las operaciones del comercio y el beneficio público de estos reinos y los de Indias, con la denominaciónde Banco de San Carlos». Su capital se establece en 300 millones de reales de vellón, luego reducido a 200, divididos en acciones de 2 000 reales cada una, que cuesta cubrir, ya que a fines de 1783 sólo se han desembolsado 28 150 acciones. Esto, a pesar de que tales acciones pueden ser suscritas tanto por particulares como por municipios, hospitales, iglesias, etc.
Nace el Banco de San Carlos, en el que sólo pueden prestar servicio súbditos españoles, ligado a la deuda pública, para amortizar los vales reales, en efectivo y a la par, y actuar como banco comercial, descontando letras y pagarés. También puede emitir billetes, a vista y sin interés, y aceptar depósitos. De sus negocios, el más saneado es la saca monopolista de metales preciosos, que en 1794 representa casi la mitad de los ingresos del Banco.
Los Otros negocios fracasan: los contratos para aprovisionar la marina y el ejército producen pérdidas, así como la compra de deuda francesa en 1788, y la compañía de seguros de Cádiz. La guerra de Independencia acelera su crisis, hasta que en 1829 desaparece.