lunes, septiembre 07, 2009

LA PRUEBA

ntuíamos que de muy antiguo debía de venir esta sana tradición cas­trense que en nuestros
barcos continua celebrándose hoy en día (también he visto que se realiza a diario en los buques de la Armada italiana, con la pequeña diferencia de que, en estos últimos, el comandante la prueba la efectúa siempre en el puente). Poco antes de Lepanto, Ruy Gómez, príncipe de Éboli y marido de la famosa tuerta, escribía, probablemente al dictado de Felipe II, una carta que enseguida envió al flamante capitán general de las gale­ras de España, Juan de Austria. Dicha carta. entre otras cosas. decía: « Si encuentra soldados cuando estén efectuando alguna comida. Su Excelencia podrá pararse para verificar qué es lo que están comiendo y probar un bocado ... ».