lunes, agosto 20, 2012

ESCUELA DE CADETES DE ÉLITE

  • Veteranos de Infantería de Marina crean un campamento para jóvenes
  • En él se les muestra cómo es el día a día en un cuerpo de élite
  • Deben seguir estrictos horarios y superar las pruebas físicas
  • Durante 10 días renuncian al móvil, a internet y a ver la televisión


  • El honor o la lealtad son valores habituales en las novelas de caballería que, sobre todo entre los jóvenes, han perdido hoy parte de su significado. Recuperar la importancia de estos principios se erige en la piedra angular del campamento impulsado por la Asociación de Veteranos del Cuerpo de la Infantería de Marina. Una escuela 'militar' de elite, dirigida a chicos y chicas de entre 14 y 19 años.
    Con esta iniciativa, la primera de estas características en España, los veteranos de la Marina pretenden acercar la realidad de las Fuerzas Armadas a los pequeños cadetes.
    En este campamento, que se ubica en el término municipal de Benagéber, a 100 kilómetros de Valencia, los jóvenes soldados pueden conocer de primera mano cómo trabaja una unidad de elite de las Fuerzas Armadas.
    No en vano, las actividades que se han programado (la primera edición ya se ha levado a cabo) son semejantes a las de los campamentos de instrucción, donde se forman los soldados que aspiran a convertirse en infantes de Marina.

    Inyección de valores

    Según Dionisio Ruiz, uno de los dirigentes de la Asociación, los jóvenes necesitan una inyección de principios: "Los chicos de hoy en día no tienen ni idea de lo que es tener valores, no saben lo que es el Ejército, a través de esta iniciativa les enseñamos a superarse, además de una profesión y un futuro".
    El campamento consta de dos partes. En la teórica, se aportan pinceladas de historia castrense; mientras que en la práctica, sobresalen las pruebas físicas que ponen al límite la resistencia de cada joven: marcha, escalada, tirolina, iniciación en el paso de flanqueamientos o defensa personal, entre otras. Todos los monitores pertenecen al Real Cuerpo de Infantería.
    La férrea disciplina militar pretende enriquecer la vida de estos chicos, que tienen que olvidarse por unos días de los teléfonos móviles. Su uso está completamente prohibido en el recinto "salvo para llamar a casa". Como internet. Y la televisión.

    Disciplina castrense

    Los horarios son estrictos. "Se les despierta cada día a las 7 de la mañana y a medianoche ya están en la cama. No obstante,hay días de marcha que tienen que levantarse a las 4 de la mañana, no tienen mucho tiempo para pensar", explica este monitor.
    Según Ruiz, el contacto continuado con la naturaleza les aporta un nuevo modo de ver el mundo. Al igual que las competencias que adquieren en esta academia, y que repercuten en una mayor autonomía personal: "Aprenden un montón de cosas, como limpiar o coser, ya que había algunos chavales que no habían cogido una fregona en su vida".
    En su opinión, el resultado de esta primera experiencia ha sido muy positivo: "Todos los chicos quedaron muy contentos y más de uno que quería ser policía ha cambiado de opinión y quiere ser militar de la Marina".
    (Referecia.-El Mundo.es  -Domingo 19/08/2012. Actualizado -