
La guardia de la entrada en el puerto era la Torre del Oro(también entonces rematada por esfera), pero como señal resultaba baja para verse en la lejanía.
Mas los tiempos y un fuerte temporal hicieron variar las cosas.Éste derribó las esferas, que fueron sustituidas por torretas:la de la Giralda, ya transformada la mezquita en catedral, con un pequeño campanario para llamar a los fieles a la oración,"a lo cristiano".La torre de guarda, la "del Oro"fue rematada en lo alto por una torrecilla de vigía. Y se consideraron innecesarias las señales luminosas de entrada.Así permanece.