miércoles, octubre 31, 2007

EL OCHO

noche al salir del hospital de San Rafael, en Cádiz, dirigí mis pasos hacia la puerta principal del Gran teatro Falla, allí, se concetraba gran cantidad de público, casi todas portaban una sonrisa incipiente que con toda seguridad, se convertiría momentos después en sonadas carcajadas.
En su interior y como no podía ser de otra forma, se celebraban‘Las Noches de Paramount Comedy’ con el gaditano Tony Rodríguez que regresaba a Cádiz con los monólogos cómicos.
Sobrepasado este escenario de la puerta del majestuoso coliseo, y ya de regreso hacia San Fernando, me dí de frente con una taberna que se llama "El Ocho",después de adivinar cual era la entrada de la misma, porque ésta hace también de tienda de barrio, me acomodé en su mostrador, me deleité observando la cantidad de objetos perteneciente al pasado y que a modo de museo, colgaban de sus paredes,hornillos, lecheras,herramientas varias y un sin fín de útiles que me hiceron retroceder a un paso no tan lejano, pero el santo santorum de este lugar, lo componía una especie de vitrina de madera, que contenia un jamón escoltado de quesos añejos y que no pude adivinar quien de los dos sudaba más.
Sea como sea, se proximó al mostrador el goberbador de la plaza y digo así, porque hay que tener arte para atender casi al unisóno lo que es la tienda con la trastienda ocupada por la tabernilla,lo cierto es, que casi sin pausa, disfruté de una cervecita y una tabla de queso, cortado como si se tratase de un cirujano oftalmólogo.
Casi al abandonar el local,se me vino a la mente, que quizas este lugar puedo ser el orígen de la inspiración de la novela famosísima escrita por Katherine Neville, "El Ocho", nunca se sabe, Cádiz dá para eso y más.
Nelson

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Eso espero yo, que Cádiz de para eso y mucho más...recuerda...acaba en 41....

Anónimo dijo...

ja ja ja Tal como lo cuentas, siento deseos de internarme en las callejuelas gaditanas buscando esa tabernilla. Si además te ha hecho recordar la novela, entonces está claro que merece la pena disfrutar de su "ambientación" y degustar el jamón y el queso, regados con esa birrita que mencionas. Un saludo Nelson. Muy interesante, como siempre.

Anónimo dijo...

Birdo,ya sabes que la imaginación es libre y además muy personalizada, si te puedo decir, queme gustan los lugares genuinos, y aquellos que te proporcionan placeres independientemente de la birra.Saludos afectuosos

Anónimo dijo...

Completamente de acuerdo Nelson. Si alguna vez pasas por Málaga no dejes de visitar la Casa Guardia. Es una especie de taberna, de las más antiguas de la capital, y muy típica. Saludos.