jueves, septiembre 06, 2007

TERRIBLE EPIDEMIA

errible debió ser la epidemia que azotó la bahía gaditana a mediados del siglo XVII, por cuento en 1648 el número de óbitos debidos a ella se cifró en 12.000 personas.Hubo necesidad de habilitar urgentemente un lugar para los enterramientos, que quedó fijado en la parte del poniente del cabildo gaditano, no lejos del castillo de Santa Catalina, donde ya se utilizaba para este fin. Una ermita exístia en el lugar, edificada por la Cofradía del San Ángel de la Guarda, que guardaba celosamente el campo santo, pero como fuera que el número de enterramientos desbordó toda prvisión, y hasta las bestias aprovecharon la ocasión invadiendo el "vererable lugar", que fue rápidamente cerrado con una "cerca grande", gracias a las gestiones del Obispo de Cádiz, y del que a la sazón era gobernador de Panamá Pedro Ximénez de Guzmán. Pues bien, próximo a este lugar se construirá el nuevo Honpital del Rey, cuya capilla sería precisamente la ermita del San Ángel. La primera piedra se puso en 1667.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Nelson, perdona que te conteste aquí a lo del camino de santiago, pero si lo pongo en su sitio, a lo mejor no lo lees.
Yo no tenía pensado hacer el camino de santiago, no me gusta andar y además tengo un gran miedo a que se me estropeen las almohadillas de la columna, que luego viene la vejez y terminamos todos como la madre del rey, en silla y mirando las vergüenzas a los demás. Pero trás leer tu artículo, y las contestaciones que te han dado, he llegado a la conclusión de que no quiero encontrar otra vida después, no quiero pasarme dias sin hablar, en "absoluto silencio", no quiero soledad, que ya bastante tengo en el invierno, no quiero meditar, que no hago otra cosa en mi vida que meditar y rectificar para volver a ser igual, porque en definitiva, nelson, la cabra tira al monte. No voy a hacerlo porque mi bipolaridad me lo impide, pero que se te de bien, y pobre del ser que te acompañe, ya os veo andando, cargados como mulas, en silencio (pero creo que por el esfuerzo) y encima sintiendo la soledad. Mira, que me dan escalofrios. que si quieres os espero en santiago con un baño caliente y una mariscada, a eso si me apunto.

Anónimo dijo...

Acompañar a Nelson debe ser un placer, en el camino, y en cualquier circunstancia. En cuanto a lo del silencio, poco se puede hablar en un beso.
Tu beso, Nelson.
Zinthia

Anónimo dijo...

Tornasol, evidentemente, hay muchas razones para hacer o no el camino, tú te sitúas en el lado de los que no lo harían,pero desde hace 1200 años, el mismo a infundido a personas de todos los paises, condición,y creencias a hacer este peregrinar mágico,sería imposible, hacer un estudio para saber las razones por las cuales esas multitudes, se desplazan para sentir lo que le camino les proporciona, de hecho,si escribieses en un papel antes de comenzar que esperas del camino, te puedo segurar que al finalizarlo, tus razones se multiplicarían por 1000. De todas, formas, el peregrinar a caba en Santiago, luego se vuelve a la realidad y no renuncio a una buena mariscada.

Anónimo dijo...

Zinthia, creo que el camino puede llegar a deshojarte, por las muchas dificultades que entraña, pero tamnién estoy seguro que el mismo, te proporcionará, los besos de paisajes increibles, se convierte en un museo a lolargo de él,disfrutando de los diferentes estilos de arte y de la variedad de una gastronomía que tan sólo se puede saborear, al borde del camino.Un beso.Nelson

Anónimo dijo...

En 1653, en el lugar denominado del campo santo, porque allí estaba emplazado el primitivo cementerio de la ciudad, se erigió una hermita dedicada al santo angel custodio, junto a la cual se levantó tiempos despues el Hospital Real de la Armada, donde más tarde veríamos la facultad de medicina.