jueves, julio 26, 2007

MÚSICA PARA LA HISTORIA

ace pocas fechas, tuvimos la ocasión de disfrutar y sobre todo de transportarnos en el tiempo a través de una serie de conciertos de música antigua que se organizaron en las ciudades de San Fernando y Cádiz, en la primera, en la Iglesia del Carmen y la segunda en el Oratorio de San Felipe Neri.
Los protagonistas que nos deleitaron con sus composiciones recuperadas en el tiempo, estuvieron a cargo del Coro La Stiga, procedente de Salamanca, y el Conjunto Vocal Virelay.
Ambos escenarios, unidos por el concierto mencionado, pero también curiosamente enlazados fraternamente, por haber sido edificios, protagonistas y testigos de la elaboración de la Constitución de 1812, en dónde sus comienzos más incipientes, se gestaron en la Real Isla de León.
Desconozco si estas coincidencias, fueron intencionadas, o no, pero, ambos conciertos, acertaron de pleno, no ya por la significación de los lugares como sedes de las Cortes de 1810, sino porque la acústica en ambos lugares, según los entendidos, gozan de una soberbia adaptación para tal fin.
La música, como dice su definición, es el artede organizar sensible y lógicamente una combinación coherente de sonidos y silencios, pero aplicando esta definición de forma particular al significado a los lugares sagrados antes mencionados, me trasladó en el tiempo, los sonidos del bullicio y la lucha de unos valores que posteriormente, se plasmaron en la Carta Magna, y el silencio posterior de un pueblo que vio como su monarca, faltó al juramento de la misma, enrojeciendo las calles de Cádiz y de muchos lugares de España de las entrañas de aquellos que supieron defender tan sagrado texto.
Afortunadamente, en esta ocasión, sólo se trababa de disfrutar de unos conciertos bellísimos sin poder evitar, la reflexión que me suscitó este maravilloso evento.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Nelson, tuve la gran suerte de poder disfrutar en el oratorio del concierto al que haces mención y realmente mereció la pena.Lo único que pude observar es que había más gente de fuera de la provincia de Cádiz que de nuestra querida tierra(aunque no sea andaluza de nacimientro ya me considero de adopción)y eso entristece porque se da uno cuenta que aquí sólo se aprecia el carnaval...pero lo demás parece como si fuera para otros.
Un cordial saludo.

Anónimo dijo...

Enma, son muchos los llamados y pocos los escogidos, si a ti te reconfortó el concierto, dalo por bueno, esperemos que a raíz de estos eventos, la semilla de la cultura caiga en buenas tierras. Un saludo afectuoso

Anónimo dijo...

Mientras en los centros escolares,lëase centros de primaria y de secundaria, la música siga siendo una maría, los escogidos seguiremos siendo pocos.
A mi me enseñaron a amar la música desde pequeña en mi casa(mi madre tocaba el piano, por cierto muy bien)y nos deleitaba con serenatas interminables que entonces nos aburría, pero que hoy en día agradecemos todos los hermanos.
Pero bueno, mientras los escogidos como tu dices seamos nosotros... todo va bien....jajajj
Saludos nelson.Por cierto, ya has vuelto de vacaciones?

Anónimo dijo...

Evidentemente Enma, que somos pocos, pero ya sabes aquello de que es mejor poco y bueno que mucho y malo,aunque esto es aplicable en todos los órdenes de la vida.
Te felicito porque tuvieses esa educación musical en el seno familar, indudablemente que eso ha despetado en tí el amor a la música, aunque entonces no lo entendieras muy bien, pero es un poso que posteriormente ha dado su fruto.
Con respecto a las vacaciones, las disfrutaré a partir de julio, te deseo que tú también las disfrutes como mereces. Besos