arece cómo si el conseguir la felicidad fuese una meta, que, una vez conseguida, ya, pertenece al patrimonio personal de cada individuo, sin pensar lo frágil que es ese estado y la línea tan delgada que separa los estadíos entre el gozo y la pena.
La felicidad no es una estación donde se llega, es una manera de viajar, dependiendo de las comodidades de dicha travesía y la ilusión por realizarlo, y si el medio que utilizaremos es el más adecuado con respecto a nuestros deseos.
Creo que la felicidad, no depende en gran medida de los golpes de suerte, porque los mismos suceden de tarde en tarde, sino con la forja del cimiento que nos proporciona las pequeñas cosas del día a día, posiblemente sea una suma y resta de acontecimientos en donde al final nuestro ánimo trazará una línea al final de las operaciones que nos proporcionar un estado de felicidad.
Los transbordos, de las estaciones de la felicidad, podrían estar dentro de un itinerario, donde se sintiera siempre la necesidad de amar, algo que esperar, y la ilusión de verlas realizadas.
Los momentos que nos aporta el presente, son efímeros, el esperar y el amar al ser eternos, divisamos las vías que nos conducirán hacia el estado que todos ansiamos, ni tan siquiera, creo que la felicidad sea hacer siempre lo que uno desea, sino estar siempre seguro de lo que se hace , esto nos proporciona un estado de sensaciones, aportan paz y sosiego.
Los apeaderos incómodos, los tabúes, las normas, las costumbres, son los peores enemigos de la felicidad, deberíamos coger el tren subterráneo que nos llevasen a las profundidades de uno mismo que nos proporcionase ver nuestra alma.
Pienso que si estamos predispuestos siempre a ser feliz, algún día lo seremos, por muy largo que sea el viaje, al final pondremos nuestro equipaje en el andén que nos proporciona la sonrisa de la finalización de un viaje placentero, pero sino es así, creo que los recuerdos, nos pondrán proporcionar una felicidad añorada.
La felicidad no es una estación donde se llega, es una manera de viajar, dependiendo de las comodidades de dicha travesía y la ilusión por realizarlo, y si el medio que utilizaremos es el más adecuado con respecto a nuestros deseos.
Creo que la felicidad, no depende en gran medida de los golpes de suerte, porque los mismos suceden de tarde en tarde, sino con la forja del cimiento que nos proporciona las pequeñas cosas del día a día, posiblemente sea una suma y resta de acontecimientos en donde al final nuestro ánimo trazará una línea al final de las operaciones que nos proporcionar un estado de felicidad.
Los transbordos, de las estaciones de la felicidad, podrían estar dentro de un itinerario, donde se sintiera siempre la necesidad de amar, algo que esperar, y la ilusión de verlas realizadas.
Los momentos que nos aporta el presente, son efímeros, el esperar y el amar al ser eternos, divisamos las vías que nos conducirán hacia el estado que todos ansiamos, ni tan siquiera, creo que la felicidad sea hacer siempre lo que uno desea, sino estar siempre seguro de lo que se hace , esto nos proporciona un estado de sensaciones, aportan paz y sosiego.
Los apeaderos incómodos, los tabúes, las normas, las costumbres, son los peores enemigos de la felicidad, deberíamos coger el tren subterráneo que nos llevasen a las profundidades de uno mismo que nos proporcionase ver nuestra alma.
Pienso que si estamos predispuestos siempre a ser feliz, algún día lo seremos, por muy largo que sea el viaje, al final pondremos nuestro equipaje en el andén que nos proporciona la sonrisa de la finalización de un viaje placentero, pero sino es así, creo que los recuerdos, nos pondrán proporcionar una felicidad añorada.
NELSON
8 comentarios:
La felicidad está en el camino, en los pequeños o grandes momentos que COMPARTIMOS.... en la ilusión por algo o por alguien.... en encuentros deseados... en los sueños... en un beso.... Por supuesto, cuando se ama y se es amado.... La felicidad está dentro de nosotros, y nos percatamos cuando sale a flote en cualquier circunstancia.
Thomas Chalmers decía: La dicha de la vida consiste en tener siempre algo que hacer, alguien a quien amar y alguna cosa que esperar.
Besos. Zinthia.
Soy feliz porque aún soy capaz de enamorame.
Soy feliz porque amo y soy amada.
Soy feliz porque aunque no hago todo lo que quiero , JAMÁS hago lo que NO quiero.
Quizá por lo que vivo
a pesar de cómo lo vivo
quizá por todo esto
a pesar de todo esto
...SOY FELIZ...
En ésta vida eres feliz en función de que veas el vaso medio lleno o medio vacio. Trás leer tu artículo, me doy cuenta que te he juzgado mal. Pensé que eras de los del vaso medio lleno. Bienvenido al club del vaso vacio totalmente. La vida es una mierda, pero no hay otro camino. Esperemos mejores tiempos.
Nelson,no se puede esperar sentado en la estacion a que pase el tren de la felicidad y si me subo, bien y si no me da tiempo, o no soy lo suficientemente valiente para cojer el tren,pues me quedare sentado y pensando en lo que pudo ser y no fué.
Alegra ese corazón, que seguro que tienes mil razones para ello.
Un saludo muy cordial.
Heaven, en absoluto, mi estado de optimísmo se refleja en el vaso medio vacío,y menos aún vacío totalmente, porque si fuese así, ya me encargaría de hacer algún tipo de trasvase.
Mi artículo, no quería transmitir esa sensación, porque realmente no tengo motivos para sentirme pesimista, todo al contrario, te podría dar mcuhas razones por las que pienso que la vida merece la pena vivirla, sobre todo, cuando los días amanecen de un rubio espléndido y sobre el horizonte, se divisa, un azul claro, y una sonrisa amplia, eso es suficiente para la esperanza, parece enteramente que tiene cuerpo de mujer.Un saludo efusivo
Anónimo,creo que de lo que se trata es hacer coincidir, el billete con la estación de destino, no me consdiero conformísta, quizás una persona demasiada inquieta,todos esperamos, a que el revisor, nos pique el billete, a unos antes que a otros, pero los factores de Renfe son iperterritos, y se presentará ante nosotros con ese gesto impasible, casi perdonándonos la vida, pero al final, introducirá la picadora, en el cartón quer nos dará la libertad.
Perdona N, es evidente que no entendí tu art. Yo estoy replegada en mis cuarteles de invierno, eso toca y yo lo asumo. Volvera a reir la primavera. Ahora si te he entendido. Me ha gustado mucho leer lo que me has contestado. Es toda una declaración de intenciones y es bonito saberlo, sobretodo esperanzador. Todo viaje que se emprende tiene su final y yo deseo que el tuyo tenga el final que más te beneficie. Si tienes alguna duda del final, hazmelo saber, yo te lo puedo reescribir, tengo algunas ideas que te pueden servir.
Bueno, pues despues de leeros a los dos ya me voy mas tranquila a la cama.
A tí, heaven, te deseo que pases esta rachilla que se que te falta poco, pero creeme en la vida todo necesita masticarse para luego ser aceptado.
A ti nelson que te voy a decir, que me ha gustado saber que no estas pesimista y que miras al futuro con esperanza.
besos a los dos.
Vuestra enma.
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