martes, mayo 15, 2007

NO SÉ SI HAY QUE TENER PRISA EN VIVIR

o que si creo es que aquellas personas que se demoran en el aprendizaje de gozar y de aprovechar las cosas bellas que la vida nos ofrece, posiblemente, cuando aprendan a valorarla, ya será demasiado tarde, se estará muy próximo a cerrar el último capítulo del tiempo que le queda por vivir.
El arco iris de la vida, nos ofrece toda la gama de colores, todos ellos se producen en el caminar de las personas, incluso el color negro, está dentro de ese espectro, la cuestión es saber difuminar los unos con los otros hasta que se consiga una franja homogénea, sin quedar estancado en un tono determinado.
A veces la vida es difícil comprenderla por sus innumerables obstáculos, quizás lo más importante será vivirla, y esto se consigue desde mi modesta opinión, sabiendo valorar las cosas insignificantes que a diario suceden y que tal vez puedan ser las más importantes, todos pensamos hacer de la vida algo grande y nos olvidamos de que la misma se compone de cosas pequeñas, equivocando el camino para conseguir la necesidad de amar o el bienestar emocional a través de posibilidades económicas, olvidando que la riqueza interior que cada cual pueda sacar al mercado de valores de la bolsa de la vida, es el mejor broker para revalorizar los valores de los títulos del amor.
Al final, creo que lo importante no son los años de las personas, sino la vida de los años, cuando se tiene prisa en vivir, como decía al principio, quizás es porque tengamos el sentimiento de que por las rendijas de nuestros dedos, se han escapado los sueños, las esperanzas, y ahora nos toca cerrar fuertemente el puño para retener lo que aún nos queda por vivir, lo ideal sería que nuestra vida no fuese una novela interminable, sino que su autor la narrase de acuerdo con sus aspiraciones y que el epílogo de la misma nos dejase un buen sabor de boca, el placer de haber conseguido algo tan elemental y tan difícil a la vez como es sentirse amado.

NELSON