jueves, mayo 24, 2007

¿SOMOS ENERGÍA?

uantos métodos utiliza el hombre moderno para satisfacer las deficiencias o la falta de respuesta con respecto a un interior que no encuentra la forma de despejar sus dudas?, quizás otros dirían de encaminar la energía que poseemos, estableciendose una batalla entre la energía positiva y negativa que según parece poseemos.
La búsqueda de la armonía, la califican como método para recargar la energía negativa, a través del sueño y la comida, y la positiva, con los ejercicios de relajación y el aire.
Según los expertos, se nos coloca una balanza imaginaria en nuestro eje longitudinal que en función del predominio de una energía u otra, nos vemos abocados a ser personas totalmente diferentes.
¿Somos realmente tan complicados?, el ser humano de por sí, lo es, ¿pero es posible controlar tantísimos aspectos para poder caminar por el sendero de la vida de una forma equilibrada?.
Sobre estos temas, que para mí son tremendamente complejos, se unen otras tesis para canalizar la energía como es el caso de una novedosa iniciativa, según la misma, se trata de "Global Orgasm",sus métodos son bastante curiosos, su propuesta es conseguir coordinar al mayor número de personas posible para que tengan un orgasmo de forma más o menos simultánea.
Esto si que ya me ha matado, en principio no me lo imagino, y también creo que puede exístir un grado muy alto de morbosidad, lo que si es cierto, que la descarga de energía en este último caso, debe ser tremenda. Apuntan , que este tipo de experiencias, hace que el ser humano aleje los estados de agresión y violencia, en esto sí puedo estar de acuerdo, lo que me hace sonreir es que tenga que ser coordinado para que toda la energía se desplace a un mismo tiempo y lugar, no sé a dónde. En fin, es cierto, que mientras se practique esto, no se piensa en la guerra, sino en otras cosas más placenteras.
Sinceramente creo, que para canalizarse adecuadamente, no digo ya refiriéndome a la energía, sino de forma estable en la vida, son necesarias muy pocas cosas, pero importantísimas, como puede ser un trabajo estable, sentirse amado, y poseer un caudal humano que irradie hacia los demás la percepción de que somos personas que merecen la pena ser amados.

Nelson